En
la Biblia, Dios se nos revela como una Trinidad, el Dios Padre, Hijo y Espíritu
Santo, personas distintas más sin división en Su esencia. La palabra hebrea
“Elohim” (Dios), que se encuentra en el primer versículo de la Biblia, es
ciertamente la forma plural de la palabra “Eloha”:
Génesis
1:1 “En el principio creó Dios (Elohim) los cielos y la tierra” (Paréntesis
añadido).
Además
otro pasaje también lo confirma:
Deuteronomio
6:4 “Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es”.
En
hebreo dice:
Deuteronomio
6:4 “Shema, Israel: Adonai Eloenu, Adonai Ejad”.
Precisamente,
este texto prueba como ninguno la pluralidad en el ser divino único; pues la
traducción literal es: “Oye, Israel: el SEÑOR nuestros Dioses, el SEÑOR uno
es”. Al profundizar en el texto hebreo, nos damos cuenta de que la palabra
“ejad” significa: “Uno compuesto de varios”; mientras que la palabra uno, de
único, no es “ejad” sino “yajid”. Así, Jefté tenía una hija “yajid”, o sea
única. En cambio, por ejemplo, las Sagradas Escrituras dicen que en un
matrimonio, el hombre y la mujer son un “ejad”:
Génesis
2:24 “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su
mujer, y serán una (“ejad”) sola carne” (Paréntesis añadido).
Aunque
la palabra “Trinidad” no se menciona ninguna vez en la Biblia, si se puede
deducir de pasajes como los que veremos a continuación en los siguientes
subtemas. Por otra parte, a las tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo, se
les atribuyen las mismas cosas; los cuales son todos Dios completa e igualmente
(1).
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FUENTE
BIBLIOGRÁFICA:
(1) DECLARACIONES DE FE DE LA IGLESIA
CRISTIANA MONTE GERIZIM. Punto II: Jehová es el Único y Verdadero Dios; Pág.
7-8.
